Como les ha sucedido a otros fabricantes, Apple ha anunciado que va a iniciar un programa de retirada de sus portátiles MacBook Pro de 15 pulgadas cuyas baterías podrían sobrecalentarse y llegarse a incendiar. De momento no se han hecho públicos casos de ordenadores de Apple que hayan llegado a este extremo, pero por desgracia ya es el segundo caso de fallos en sus MacBook Pro, tras el de los teclados de las dos primeras generaciones con su nuevo mecanismo de mariposa que son más delgados pero también más propensos a fallos.
Por supuesto, no todos los portátiles de Apple están afectados y el programa de recogida es voluntario (es decir que el usuario lo entrega para ser reparado sólo si teme que su batería sea de las defectuosas). Según la compañía, hay un número limitado de unidades afectadas vendidas entre septiembre de 2012 y febrero de 2017 y pueden identificarse por el número de serie del producto.
Apple ha puesto a disposición pública un enlace en su web de soporte https://support.apple.com/es-es/15-inch-macbook-pro-battery-recall para saber más sobre los productos afectados y cómo cambiar la batería sin coste alguno.
Según Apple para confirmar cuál es su modelo, el cliente debe elegir Acerca de este Mac en el menú Apple de la esquina superior izquierda de la pantalla. Si aparece “MacBook Pro (Retina, 15 pulgadas, mediados de 2015)”, debe escribir el número de serie de su ordenador en la página del programa para saber si es válido para hacer el cambio de batería.
Apple calcula que el tiempo necesario para el cambio de las baterías será de al menos dos semanas, y el cambio de la batería no supone una extensión de la garantía del mismo. Curiosamente, hace algunos meses, Apple tuvo también un problema con las baterías de los iPhone (el famoso #batterygate) tuvo que ofrecer un reemplazo por sólo 30 dólares a millones de usuarios de iPhone.
De momento, como decíamos, es un programa voluntario y no se han sabido casos de portátiles que hayan ardido o herido a sus dueños, de manera que el asunto está lejos de casos como el de los Samsung Note 7 que en 2016 debieron ser retirados de manera obligatoria del mercado por el peligro de incendio de sus baterías.
